El País (no os perdáis al final de la noticia el apartado Vargas Llosa, en detalle).
También nos ofrecen las primeras páginas de su último libro: http://www.elpais.com/elpaismedia/ultimahora/media/201010/07/cultura/20101007elpepucul_2_Pes_PDF.pdf
jueves, 7 de octubre de 2010
miércoles, 6 de octubre de 2010
Manolito Gafotas
Pobre Manolito: Autor:Elvira Lindo. Ilustraciones: Emilio Urberuaga.
1. Los piolines
Manolito decidió hacer cuenta de los regalos que le habían dado al Imbécil, y vio que superaba el valor de los que le regalaban a él por su cumpleaños. Entonces, se enfadó. El abuelo, le regaló un chándal de Piolín para que se pusiera contento, y Yihad se rió de Manolito, pero luego, el abuelo le contó a Manolito, que a Yijad también l habían regalado uno. Por último, Manolito, descubrió que había sumado mal el precio de los regalos, y era casi igual que el valor de los suyos.
2. La crueldad de una madre
La sita Espe, aparte de ser la psicóloga por teléfono, es la profesora de Manolito. Y esta, mandó a toda la clase, hacer un payaso para el día de la madre. Manolito, lo hizo muy bonito, pero luego le puso algunos “detalles”, y todo el mundo hizo lo mismo. Al llegar a casa, escuchó a su madre y a la madre del Ore, que todo lo que hacían por el día de la madre era horroroso. Manolito se entristeció, y se puso a llorar. Destrozó el payaso, y se encerró en el baño. Su madre, arregló el payaso, luego le dijo que todos sus regalos eran bonitos, y se durmieron juntos en la cama.
3. Terrible sospecha
El padre de Manolito llamó a casa a las diez y media, como siempre. Le dijo a Manolito, que tenía una sorpresa para él, y según las pistas que le dio, ¡traería un perro a casa! Manolito y el Imbécil estaban tan ilusionados, que no paraban de pensar en el perro en ningún momento. ¡Hasta hicieron una interpretación y todo! Un día, al volver del colegio, el Imbécil se puso ¡a “hacer sus necesidades” en medio del parque! No, si ilusión no les faltaba…
El padre de Manolito llegó a casa, pero no con un perro, sino con un conejo. Manolito y el Imbécil, se quedaron sorprendidos, pero poco a poco, se fueron haciendo la idea. Al principio les parecía aburrido, porque el conejo no hacía nada. Pero luego, cuando la familia se despertaba y tenían que jugar al escondite, porque el conejo se escondía todas las mañanas, ya se iban divirtiendo más. Hasta que un día, Manolito llegó del colegio a casa, y su madre le dio la mala noticia de que el conejo había desaparecido. Unos días más tarde, en casa de Manolito, se celebraba el cumpleaños del camión “Manolito”, y para celebrarlo, la madre de Manolito preparó conejo. Cuando lo iban a comer, Manolito se dio cuenta de que su madre, podría haber matado al conejo, y cocinarlo, así que decidió no comer el conejo y se entristeció mucho.
4. Una perdida irreparable
Era Navidad, y a Manolito (¡por fin!) le había tocado hacer de persona en el belén viviente. En cambio, el Imbécil, siempre hacía de niño Jesús, ¡vaya morro! Unos días más tarde les tocó ir a pedir por las casas mientras iban disfrazados, pero pocas cosas les dieron… ¡y eso que el Imbécil iba de Spider-Man! Al llegar a casa, se pusieron a comer las pocas cosas que les dieron, y se dieron cuenta de que … ¡el Imbécil había desparecido!
5. Se busca
Manolito y su madre fueron rápidamente a buscar al Imbécil por los lugares donde los niños habían ido a pedir. Buscaron por toda la ciudad, y cuando ya daban al Imbécil por perdido y subían las escaleras para i a casa, escucharon unas voces de casa de la Luisa. Timbraron y entraron, y de repente vieron al Imbécil. Manolito y su madre se alegraron mucho por haberle encontrado. Pasaron el rato en casa de la Luisa, y Manolito descubrió que aquella noche su madre estaba muy raro con él, porque le mostraba mucho cariño hacia él.
6. No quiero ni acordarme
Era época de Reyes, y era el día de la Cabalgata. Por desgracia, Manolito tenía que ir como siempre con su abuelo, y él solo de fija en las cabarets. Pero por suerte, aquel año pudieron ver los Reyes, y algo más… ciudadanos de Carabanchel haciendo de romanos, pero lo peor de todo, es que uno de los romanos, ¡era el padre de Manolito! Aquello creó un gran trauma en Manolito, y nunca pudo creer, lo que sus ojos vieron aquella tarde…
. El esquirol
Manolito estuvo enfermo unos días. Y el día que se curó, fue al colegio, y resultó que aquel día no había clase. Estaba el solo en clase, y le pregunto a la señorita Espe por sus bragas (ya que estos días que no había ido al colegio, decía Yihad que se las había visto). Entonces, la señorita le echó del colegio, y Manolito se fue para el parque. Allí, medio delirando, se subió a un árbol, y se tiró pensando que era un pájaro. Más tarde, cuando despertó después de aquél golpe, su madre estaba con él cuidándolo.
8. Velázquez contra el sexismo
La sita Asunción repartió unos papeles para que los alumnos escribieran como se relacionan entre sexos. Al principio vieron que se llevaban muy mal, pero después, hablando y enseñándoles que los niño y las niñas pueden llevarse muy bien, aprendieron a ser amigos.
9. M.M
Melody Martinez, es una niña nueva en el colegio de Manolito, y es una niña muy interesante que explica sus historias a los demás niños. Les cuenta sus problemas familiares (sus padres están en la cárcel), como aprendió a hacer burbuja gigantes con el chicle, y como llegó a parar a Carabanchel. Lo mejor de todo, es que M.M se enamoró de Manolito, y ella le defensaba de todos, y no se separaba de él en ningún momento.
Elvira Lindo:
Elvira Lindo nació en Cádiz en 1962, aunque vive en Madrid desde los doce años de edad. Empezó la carrera de periodismo, que abandonó en 1987, cuando pasa a trabajar para Radio Nacional de España como locutora. Al poco tiempo empieza a redactar guiones, tarea que repetirá en la SER y en varios programas de televisión. Es en estos guiones donde ve la luz, por vez primera, el personaje de Manolito Gafotas. Animada por su marido, el escritor y académico Antonio Muñoz Molina, Elvira Lindo recoge estos guiones y les da forma de novela. Manolito Gafotas se publica en 1994 y es un éxito inmediato.
Además de los libros de Manolito Gafotas (ya va por el séptimo), Elvira Lindo ha publicado cinco libros de otro personaje, Olivia (una niña muy traviesa, cuyas aventuras van destinadas a un público de corta edad), novela adulta (El otro barrio y Algo más inesperado que la muerte) y hasta una obra de teatro (La ley de la selva). Desde su columna veraniega en El País ha caricaturizado su vida de intelectual 'progre', publicándose después las crónicas en forma de libros (Tinto de verano, El mundo es un pañuelo (Tinto de verano II) y Otro verano contigo). También se ha realizado una adaptación teatral de Manolito Gafotas, por parte de la compañía Ados Teatroa.
Además, Elvira Lindo ha escrito numerosos guiones cinematográficos:Ataque verbal, La primera noche de mi vida, El cielo abierto, la adaptación de Manolito Gafotas y la de Plenilunio, novela escrita por su marido. Suele formar tándem con el director Miguel Albadalejo, e incluso ha aparecido en algunas de sus películas. Su novela El otro barrio fue llevada al cine por Salvador García Ruiz en 2000. Ganadora del Premio Nacional de Literatura Juvenil en 1998, Elvira Lindo sigue colaborando asiduamente en el diario El País.
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